“Voy a ser criticado hasta que termine mi contrato, que Dios quiera lo pueda cumplir”
A diferencia del peluquero argentino, que dejó para el recuerdo aquella famosa frase "No me peguen, soy Giordano", éste Giordano oriental no pide clemencia ni piedad y les hace frente a los reproches de su propia hinchada.
CRÍTICAS.
Al ganar el clásico, el DT de Danubio acalló momentáneamente las críticas y los pedidos de renuncia.
Tras la derrota ante Tacuarembó, desencajados rostros de fanáticos franjeados se agolparon contra el alambrado para despedir al técnico con insultos y exigencias de renuncia. Pero el floridense no reaccionó.
Tragó saliva, trabajó toda la semana y esperó a que le llegara su hora. "Es que estoy por fuera de esas cosas, no me puedo detener en eso.
Te lo dije la otra vez y te fui sincero porque yo soy honesto cuando hablo. No le busco la quinta pata al gato", dice Jorge Giordano, el técnico de Danubio que ganó el clásico del domingo y encaminó a su equipo en ambas tablas, la del Clausura y la Anual."No me peguen, soy Giordano", dijo el coiffeur argentino hace ya unos cuantos años mientras era golpeado por hinchas de River a la salida de un superclásico.
Se tapaba el rostro y clamaba piedad.
Este Giordano floridense no pide clemencia ni se cubre la cara, aunque tampoco pone la otra mejilla. Se para ante las críticas de los hinchas y responde con su trabajo y convicción.
CONVIVIR CON ESTO
La previa del Defensor-Danubio estaba llena de morbo: el técnico que perdiera, seguramente, dejaría su cargo. El entrenador franjeado viene soportando reproches desde el torneo anterior, y pese al gran triunfo del clásico en el Franzini está convencido que jamás logrará la paz completa: "El domingo otra vez voy a estar en tela de juicio" asegura, y agrega que "así tengo que convivir hasta que termine el contrato acá".Sorprendidos por lo que acababa de afirmar, le preguntamos si no consideraba que por haber ganado contra Defensor había conseguido calmar los ánimos de los hinchas por un tiempo, pero parece que el hombre está convencido que no es así: "El domingo vas a ver que si las cosas no salen voy a ser criticado de vuelta y tengo que convivir con eso hasta el final de mi contrato, que Dios quiera lo pueda cumplir".Esta última frase sobre poder cumplir el contrato, refleja que el técnico danubiano es consciente que su crédito se extendió con este triunfo, pero deberá revalidarlo con otras victorias, o de lo contrario volverá a estar en la misma situación que vivió en la previa del clásico.Como él mismo dice, si el domingo en Jardines contra Liverpool las cosas no salen, otra vez volverán las críticas, pero él no responderá "No me peguen, soy Giordano". Esa frase sólo la pronuncia su tocayo porteño.
“IFRÁN, CUÁNTO MÁS SOLO JUEGA, MÁS DAÑO HACE”
Danubio presenta un esquema táctico con un solo punta, que es acompañado por tres jugadores de buena técnica que llegan desde atrás. Y sobre esta situación, Jorge Giordano revela que "el llanero solitario", como le dicen los hinchas a Ifrán, porque es el único delantero, se siente más cómodo cumpliendo esa función: "Él está en un gran momento, y acá tenés otra de las cosas que la gente no se da cuenta, y es que cuanto más solo juega, más daño hace. Él se siente cómodo de esa forma, se pone contento de jugar así, y hay que aprovecharlo. Y tiene dos pasadores, o tres, como Recoba, Grossmüller y Porcari".
LAS TORRES GEMELAS
El domingo, Gustavo Ferrín sorprendió colocando como delanteros a Sebastián Taborda e Ignacio Risso, dos torres que parecían imposibles de bancar. "Uno prevé esas situaciones, pero a veces los problemas en el fútbol no tienen solución" explica Giordano.-Son más altos que todos, ¿eso es lo que no tiene solución?-Claro, son más altos y tienen un excelente juego aéreo. Había que convivir con eso pero la verdad es que los muchachos pelearon de arriba como locos.
“PORCARI ES FUNDAMENTAL, POR ESO LO TRAJIMOS”
Giordano fue criticado por los refuerzos que arrimó a Danubio a inicios de temporada. Algunos de ellos no dieron el tono, caso Diego Fernández que ya ni de suplente aparece, o el mismo Pumar que llegó desde Fénix, el equipo que había dirigido este técnico. Otro que llegó desde Capurro fue el cordobés Matías Porcari, que el domingo además de convertir el gol del triunfo se mandó un trabajo espectacular. Según Giordano, "la función táctica que hizo Porcari en el equipo fue fundamental porque jugó de punta, jugó de media punta, de enganche, tapó a Viudez; hizo un gran partido y me alegro por él porque se lo merece porque es un gran muchacho y acá en Danubio lo quieren mucho. Él se está arrimando a su nivel; estuvo casi cuatro meses sin jugar al fútbol. Nosotros lo conocemos bien y por eso lo trajimos a Danubio".
GANÓ LOS DOS CLÁSICOS
Después de Gerardo Pelusso, en 2004, ningún otro técnico de Danubio había ganado en sus dos primeros clásicos, hasta que Jorge Giordano logró empardar a su coterráneo floridense.En la temporada 2004, Pelusso obtuvo un triunfo de 2-0 sobre Defensor Sporting en Jardines por el Torneo Clasificatorio, y ganó 1-0 en el Apertura. Luego empató 0-0 por el Clausura, y recién en el Uruguayo Especial 2005 perdió su invicto.Después de Pelusso llegó Gustavo Matosas, que en su debut clásico sufrió una catastrófica caída de 0-4, un domingo de mañana en el Franzini, cuando toda la hinchada pidió a coro la renuncia del técnico. Sin embargo, la dirigencia lo mantuvo y Matosas terminó ganando el Uruguayo un año después. También perdió en su segundo clásico, 0-2 en Jardines por el Apertura 2006, pero ganó 2-0 en el Franzini por el Clausura. Tras Matosas llegó Gustavo Dalto, y en sus dos clásicos empató 0-0 y ganó 4-3. Después Martín Lasarte, que ganó 1-0 y perdió 1-0, y finalmente Giordano, que ganó 3-0 en el Apertura y 1-0 en este Clausura.
De la edición digital de Ultimas Noticias de hoy.
No hay dudas Jorge es noticia!!
Gracias al aporte de Nestor Francia de Visión Ciudadana de San José
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