RIVER DEBERÁ PRESTAR ATENCIÓN CENTRAL EN LO LOCAL

Escribe Martín Alexandre

No fue un fin de semana “rivertido” porque hasta en Argentina las señales que envió el Titanic de Nuñez no eran para promocionarse positivamente. En el “Campeones Olímpicos”, la cosa no se presentó bonita en la previa porque los de la diagonal roja debían remontar un 1 a 0 adverso siendo un plantel corto y teniendo bajas sensibles como las del goleador Fabián “Huevo” Vázquez, Nicolás Di Carlo y Mauro Cardozo


Era una novela con guión escrito por el demonio del fútbol que ni siquiera San Cono pudo bañar de belleza ante los de San José.
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Hablando concretamente del cotejo hay que decir que comenzó parejo. River aviso con un busca pie de Urbán que nadie tocó y de inmediato Central insinúo y no perdonó. Pablo Cabrera Plata, el ex Avenida y Atlético, recibió un centró de Gandini y de cabeza puso el 1 a 0. Alarma total no solo por el 2 a 0 global sino por eso de hacer un tanto de visitante que –valga la redundancia- tanto pesa en este tipo de definiciones copadas.

Igualmente, River trato de no perder brillo y al instante el león Castillo apretó el gatillo; “Nico” con fuerte derechazo fusiló al cancerbero Calero y revivió a River. 1 a 1 antes de los veinte minutos y luego el trámite puso freno a las emociones por lo que se fueron al descanso con ese resultado equiparado.

En el segundo tiempo, con la variante de Renzo García en lugar de Gastón Irureta y una lógica asunción de protagonismo los riverplatenses jugaron con una filosofía de “gloria o abismo.” Un gol bien anulado a Castillo, otra serie de intentonas, fueron perfumes con buena poción cuando el rojiblanco tuvo la posesión. Luis Mario a buen nivel, Diego Pérez y “Nacho” García, yendo, viniendo y metiendo fueron algunas cartas de un equipo con actitud. Precisamente esa predisposición les permitió ponerse en ventaja porque en un centro al área Pérez metió un notable cabezazo que se transformó en un verdadero golazo. 2 a 1 y quedaba tiempo, pero en el minuto 56 el buen futbolista josefino Marcelo Rodríguez hizo que los suyos se pusieran empataDOS.

La buena definición del volante visitante sentenció todo, explicó que no habría poema épico para los de Pedro “Cacho” Mansulino porque necesitaban otra vez dos goles mas y eso ya era mucha diferencia para lo que quedaba por disputarse entre dos escuadras de nivel similar. De todas maneras, el querendón campeón floridense no bajo los brazos aunque nada nuevo positivo pudo encontrar y el decano josefino se dedico a contragolpear y al final hasta logró ganar.

Cerca del cierre Guardado la mando a guardar, puso el 3 a 2 final, 4 a 2 resultado global, Central sigue, se mide con Racing de Durazno y River ya piensa en lo local.

¿Qué habría pasado si estaba Vázquez (mal expulsado en la ida)? ¿Y las demás ausencias? Quizás sería un colorín colorido más que colorado el recientemente narrado pero lo concreto es que River –que no nos pareció menos que su rival- se quedó con esos hipotéticos y Central con la clasificación.